La aventura fue que no hubo aventura. Estar en la ciudad donde se desarrolla la acción me dotó con la increíble ventaja de terminar viendo la ceremonia de apertura en la tele como todos ustedes... menos los grinchs de las olimpiadas que hicieron otra cosa, o mi flatmate, que por aquello de que es drummer profesional, fue de voluntario a tocar tamboras a la ceremonia de inauguración y regresó orgasmeado de felicidad para siempre mañana. Yo me lancé a Hyde Park, donde me dijeron que habría pantallas gigantes, pero no que estaban dentro del LondonLive2012 (algo así como el Corona Capital) y que tendría que pagar £65 para entrar. Como soy una ruca veintinueveañera y ya no sé en qué se las gastan los morros de hoy en día con sus músicas y hipsterismos, además que con esos precios me dan achaques en el codo, dije "paso" y fuí con mi amigui compañerita a preguntar dónde estaba la pantalla gigante más próxima. Esta vez nos equivocamos de dirección, porque, contrario a lo que la lógica nos dicta, el Victoria Park no está cerca de la estación de Victoria, sino al lado opuesto de la ciudad... así que terminé en un Pub tomando sidra y viendo la ceremonia en la tele.
Con todo, se pudo sentir la vibra de la gente, todos aplaudiendo y vitoreando a la reina cada vez que aparecía, algo así tipo el escándalo que le hacen a Peña Nieto, pero en bonito... quien por cierto, me recuerda a mi abuelita (la reina, no Peña), monarca y matriarca de todas las celebraciones importantes y con la misma cara de que ya está hasta la madre de las mismas y se quiere ir a su casa pero no puede porque es monarca y matriarca y etc etc. Pobres, qué estrés... y no haré el chiste de los uniformes y Sanborns/piñatas/Jorge Campos, en lugar de eso les dejaré los...
Momentos gloriosos del caralibro (vol.II) :