Barce I

Y que me voy a Barcelona.

Es un desmadre volar ahorita, en parte por el volcancito islandés ese bautizado por el gato que caminó sobre el teclado del wey que le pone los nombres a los volcanes, en parte porque hay huelga en British Airways y si decides viajar con ellos, te hacen firmar un papelito donde te comprometes a no quejarte de que la comida esté desabrida o que el azafato te mire feo -con todo, el filete que me tocó fué el trozo de carne más delicioso en la historia de la aviación - así que no pudimos decir nada sobre las dos horas que se tardó el avión en despegar, primero, porque los weyes de control aéreo mandaron un super boeing intercontinental a despegar a una pista para aviones nacionales en la que no cabía, segundo, porque los aviones no tienen reversa y tuvimos que esperar a que llegara aquééééééél tractor del horizonte que viene a dos centímetros por hora para que nos remolque de regreso... que eso y la huelga de British nada que ver pero igual fírmale y te callas.

Siempre he dicho que una de las ventajas de ser un zotaco es que tienes más espacio para viajar cómodo en los aviones... aahhh pero no contabas con los asientos ergonómicos de British, con el superpoder de poner un bulto en lo que ellos infieren es la altura del cuello, que a tu mexicanidad promedio le queda en la super cabeza y hace que te de una tortícolis de antología.

Dramatización.

Felizmente, cada asiento tenía su mini tv con canales y pelis, así que me aventé The Man Who Stared at Goats, La Princesa y el Sapo, Avatar (de nuevo), un capítulo de The Big Bang Theory y algo de música rara que en la vida había escuchado.

Llegué tarde a Londres, donde hacía escala para tomar el avión a Barce, lo cual me hizo perder el vuelo y me pasaron a otro que, además, se retrasó a su vez y ya no había mini pantallas para entretenerme. Lo bueno que me tocó el asiento de la ventana y de menos podía ver el horizonte... hasta que llegó Air Finland y se me plantó al lado con todo el pinche logo a lo ancho de mi ventana (o sea, de tantos países que tiene el mundo, teníííííííía que ser Air Finland, vddd pinche destino culero??). Total que llegué a Barce a los mil años, hice mil malabares para completar el depósito del depa que rentamos - que el euro anda por la calle de la amargura y ninguna casa de cambio en México te quiere vender - y al fin, a descansar en el Dab Theater:

Foto desde el baño.

En mi gran e infinita sabiduría, reabastecí
el papel de baño con toallas para cocina y
no me di cuenta hasta que "hubo necesidá"

De ahí, a tirar el jet lag en lo que llegaba Kes. Llegó llevando la playera de Cats&Threadmills que le hice - awwwn - y de ahí nos fuimos a caminar por Las Ramblas hasta el barrio gótico... que estaba lleno de vikingos rudos haciendo burbujotas:

Spartaaaansss, what is your profession???

Niños cagapalo tronando las burbujotas
que los vikingos se empeñaban en hacer.

Y ese fue el primer día.